Cada día en el mundo hay tragedias que afectan a cientos de miles de personas. Hambre, guerra, abusos, odio racial, desastres naturales. Estas tragedias aparecen en nuestros medios como diarios, radio y televisión todos los días. Todos lo hemos visto pero, qué sientes cuando lo ves?.
Caminamos por la vida pensando en un nuestro pequeño mundo. En nuestros problemas cotidianos que a veces se nos hacen inmensos. Penas de amor, dificultad económica, soledad, amigos que se alejan y tantas cosas que oprimen nuestro corazón. Pero, que pasa cuando el problema es de los demás?.
Recuerdo que hace un tiempo una mujer de 70 años cayó al Metro en la mañana. Se decía que se había lanzado. Otros que había sido un accidente. Lo único claro fue la reacción de la gente: "Si se quiere suicidar porque no lo hace a otra hora... llegué tarde al trabajo!". "Debe ser exhibisionista para elegir tirarse cuando el Metro está lleno de gente, debe haber querido que todos la vieran!".
A alguien se le ocurrió pensar que debe pasar por la cabeza y el corazón de un ser humano para decidir terminar con su vida?. Las penas, angustias y el dolor que puede llevar a alguien a cometer suicidio?.
Las tragedias se pasean por los noticiarios en medio de noticias intrascendentes y reportajes creados para llenar el horario y no saturar. Hasta que vemos "Tragedia en Somalía, miles de niños mueren de hambre cada día". Y cuál es nuestra reacción?. Tal vez decir "qué triste" o "qué terrible" pero sin sentirlo de verdad. La misma reacción que tuve cuando lo vi.
Qué nos pasa que ya nada nos impresiona?. Que el dolor de los demás no importa?.
Si una familia es destruida por un acto de violencia no nos provoca nada a menos que conozcamos a esa familia. Pero el dolor para ellos es el mismo.
Espero que algún día recobremos esa solidaridad y ese "ponerse en el lugar del otro" que este mundo saturado de información nos ha quitado. Y volvamos a ser más humanos.
Con cariño para quienes lo están pasando mal...

Cada uno piensa en si mismo en estos tiempos, reflexiones como la tuya son un bálsamo, da para pensar que algunos podemos cambiar las cosas y transmitirlas a nuestros hijos.
ResponderEliminarPero la inercia nos hace olvidar y seguimos cada uno en lo suyo, hasta que viene un comentario como el tuyo y remece